Quien podría pensar que antes del pitazo del incorregible arbitro de Cipolleti, Huracán podría sortear esta instancia teniendo como unica salvación la victoria o a lo sumo el empate con tiros desde el punto de penal? Muy pocos.
La respuesta la tuvieron los jugadores, que demostraron la camiseta que llevan puesta y derrotaron a un duro rival en calidad de visitante. Schefer-Lopez-Yañez nos dieron la alegría, pero todo el equipo actuó de una manera brillante metiendo cuando habia que meter y jugando cuando el rival lo requería (y cuando el arbitro sancionaba).
Una vez mas el globo whitense sigue dando que hablar, hasta en las tribunas donde el colorido albirrojo se llevo la mayor atracción.
Calor? viaje? comida?. Por este equipo ya nada importa. Solo verlo jugar y ganar. Por ahora lo esta logrando.
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